Después de un Congreso de ‘mataperros’, ‘comepollos’ y ‘robaluces’, uno hubiera pensado que los partidos serían muy escrupulosos en la selección de sus candidatos al Parlamento y en que pondrían énfasis en renovar la política con cuadros profesionales, especializados en sus campos y alejados de la bulla mediática y la controversia. Todo parece indicar que nos hemos equivocado.
Porque en la relación de postulantes que las agrupaciones políticas terminaron de elaborar ayer proliferan las personalidades improvisadas –sacadas de la farándula o del deporte con la idea de que jalen votos–, los individuos colocados por el único mérito de ser familiares de los líderes, y los personajes cuestionados por escándalos del pasado.
MATES Y REFLECTORES. El primer tipo de candidatos se puede hallar en tiendas políticas tan distantes como Perú Posible y Fuerza 2011. Hasta ayer al mediodía, los chakanos pensaban llevar con el número 1 en Lima a la actriz Ebelin Ortiz, conocida por su personaje de Magnolia Merino y por los líos con su expareja Ricky Tosso, pero no por mucho más.
En el transcurso del día, ante las críticas, decidieron poner en esa ubicación a la exvoleibolista Cecilia Tait, quien no se recuerda que haya hecho demasiado durante su paso por el Legislativo 2001-2006.
Los fujimoristas no se han quedado atrás en eso de buscar figuras mediáticas y han puesto en el número 6 al periodista Gian Carlo Vacchelli, ex comentarista deportivo de RBC, a quien uno recuerda principalmente por su saludo “¡Buenas noches… Perúuu…!”. Fuerza 2011, por supuesto, también tiene su voleibolista, la ex-capitana de la selección de mayores Leyla Chihuán.
Junto a Tait y Chihuán, completan la escuadra de exvoleibolistas la pepecista Gabriela Pérez del Solar y la nacionalista Cenaida Uribe. A la hora de elegir a sus candidatos, para algunos partidos también ha sido decisivo un asunto tan arbitrario como el parentesco.
Por esta razón, Kenji Fujimori tiene el codiciado número 3 en Fuerza 2011 por encima de cuadros mejor preparados y menos controversiales. Y por eso en Alianza Por el Gran Cambio César Acuña ha conseguido que se le dé el número 1 en La Libertad a su hijo Richard, de 26 años, y el número 2 en Lambayeque a su hermana María. Todo queda en familia.
POLÉMICA. Curiosamente, Perú Posible y Fuerza 2011 son, también, las agrupaciones en las que más destacan los personajes metidos en escándalos. La primera no tiene empacho en llevar a gente como José León Rivera, exdueño de un hotel en el que se ejercía el meretricio; Modesto Julca, que se jaraneaba en fiestas con vedettes en el Pronaa, y Juan Ramírez Canchari, quien reconoció a su hija después de 21 años. Los fujimoristas quieren meter en el Congreso a Luz Salgado, Martha Chávez y Carmen Lozada de Gamboa, desaforadas del Parlamento porque habrían recibido dinero de Montesinos.
Las otras listas no están mucho mejor. En el Apra, las promesas de renovación y de apertura quedaron en el olvido, sobre todo después de la renuncia de su ex candidata presidencial Mercedes Aráoz, pues de inmediato la dirigencia se aseguró los primeros lugares y relegó a los invitados del puesto 8 hacia atrás.
Solidaridad Nacional –que, hasta el cierre, no había dado a conocer su lista de candidatos– ha quedado como un cajón de sastre en el que han ido a parar parlamentarios huidos de otras tiendas: el exchakano David Waisman, el exnacionalista Isaac Mekler, los ex-FIM Gustavo Pacheco y Heriberto Benítez. La única novedad es la candidatura del ex zar anticorrupción Martín Belaunde. Nada nuevo bajo el sol.