¿Por qué cayó el Sí?: claves de la No revocación y un eventual gobierno municipal sin mayoría. ¡Gracias Marco Turbio!

El politólogo Santiago Pedraglio y el psicoanalista Jorge Bruce detallan lo que dejó la consulta popular y el nuevo panorama que avizora el conteo de Onpe para Lima

Emergió una atmósfera de viveza, de criollismos, una suerte de componendas completamente asociadas a intereses personales circunscritos en la figura de Marco Tulio Gutiérrez. La lectura del psicoanalista Jorge Bruce es tajante y alude a la última semana del proceso de revocación que acarreó un viraje definitivo del electorado en favor deSusana Villarán. La alcaldesa, en efecto, rescató de lo que pudo ser su antesala al cadalso, un triunfo agónico pero fortificante. Hoy el conteo de ONPE confirma su permanencia en la alcaldía pero también la inserta en un escenario inconveniente: no tendrá mayoría en el Concejo. Aquí algunos pormenores:

LA ÚLTIMA SEMANA DEL SÍ

Nueve puntos de diferencia del Sí sobre el No eran corta garantía a una semana de la consulta popular. En palabras de Jorge Bruce, hubo un tramo todavía amplio para el análisis y determinación del elector a partir de eventos puntuales: los agrios textuales de Marco Tulio Gutiérrez, la catastrófica exposición de ideas y el audio que puso en evidencia a Luis Castañeda Lossio. Cada punto tuvo estrecha relación. “Esa frase sobre las mujeres permitió a muchos reparar en que eran parte del porcentaje mayoritario que atendía a un personaje ordinario, chabacano, vulgar y, en general, emergió toda una atmósfera de viveza, de criollismos, no solo en él sino en los promotores de la revocatoria”. Según ensaya, para el votante fue definitivo llegar con esta idea a la “desastrosa” presentación del Sí en el debate y a la develación del registro que mostraba “esa forma oculta como actúan algunos partidos políticos”. “La gente empezó a sopesar que no valía la pena meterse en este lío y en este caos para sancionar a una autoridad imperfecta, seguramente, aunque no para tanto”.

ALIANZAS SÍ, ALIANZAS NO

Del otro lado, al menoscabo del Sí se imponía la certeza de un nuevo gobierno municipal, con Susana Villarán vigente pero ahora signado por la concertación. El respaldo expreso del PPC tuvo su punto culminante con la aparición mediática de Lourdes Flores en los últimos días de campaña. Esto habría inyectado al sufragante la sensación de un mandato villaranista con mayor orden para el periodo que le resta. La lectura del analista político Santiago Pedraglio sobre el particular así lo refrenda: “Fue fundamental. Podría haber un mandato de Susana Villarán sin mayoría en el concejo pero ya la concertación con sus opositores es un gran aporte a Lima. No hay riesgo en ese sentido si el compromiso del diálogo está presente”.

“Además del PPC, el electorado vio en el apoyo que muchas personas públicas ofrecieron a Villarán una organización notable ante lo desperdigado, caótico e incierto que asomaba con los revocadores. Al final el colectivo por el No transmitió de Villarán una presencia que no había tenido hasta ahora. Hizo que se conecte más con la gente y se sintiera que la ciudad podría ser mucho mejor”, remarca Bruce.

QUIEBRES FINALES

Hubo un cisma dentro del colectivo por el Sí y la mayor muestra afloró durante el cierre de campaña en San Juan de Lurigancho. La ausencia de Marco Tulio Gutiérrez en la celebración de Solidaridad Nacional la noche del 14 de marzo no fue gratuita y, a juicio de allegados el grupo revocador, intentó solaparse con la versión de que se vivieron cierres de campaña por separado. “Queda claro que hubo pugnas internas, desencuentros en torno a la conveniencia de que Solidaridad Nacional salga a la luz como partido detrás del proceso o no. Detalles que ya la pésima presentación en el debate habían mostrado”, dijo Santiago Pedraglio a elcomercio.pe.

En tanto, para Jorge Bruce el grupo revocador tuvo una grosera falta de cálculo en sus intereses y “todo se les escapó de las manos”. “Mi hipótesis es que estos revocadores profesionales como el señor Gutiérrez, que ya han actuado en otros lugares, no calcularon que Lima es una plaza totalmente distinta donde hay una presencia muchísimo más vigente de los medios de comunicación con una vigilancia de observadores calificados que analizaron paso a paso lo que iba ocurriendo (…) Se vio un tropel desordenado. Les quedó muy larga la cosa. Se les escapó totalmente de las manos y terminaron en una dispersión. Si esto duraba una semana más, terminaban con menos puntos que ayer incluso”.

DECISIÓN FINAL, REVOCACIÓN DE REGIDORES

Es cierto, Susana Villarán ha sido favorecida más por el antivoto que por simpatías a su labor, sostiene el politólogo. Sin embargo, explica, no es esta una situación anormal. “Una revocatoria es como elegir por el mal menor. Lo mismo que sucede con una segunda vuelta, y eso ocurrió. Ya tiene una lección aprendida y definitivamente ahora, con una eventual revocación total de sus regidores, debe valerle sobremanera a la alcaldesa esa alianza con el PPC que fue algo de lo que prescindió al inicio”. Para Santiago Pedraglio hay ya un derrotero marcado por el trabajo de los concejales que aparentemente dejarán su labor por el sufragio popular, y ello también eximirá de riesgos al gobierno de Villarán en adelante.

De otro lado, la óptica de Bruce es más que nada una contraposición. En esa línea opinó que el votante, involuntariamente, llevó a que la ciudad tenga una nueva elección por el desconocimiento de los regidores. Concluye que Lima enfrentará un panorama de alerta ante nuevos funcionarios inexpertos que, quiérase o no, debemos elegir. “Los revocadores nos hicieron mucho daño en todo sentido, gastamos un montón de plata para que ahora elijamos regidores inexpertos. Un desastre, me ha dado mucha pena, a la ciudad le va a costar mucho todo esto”, refiere.