lunes, 23 de marzo de 2009

DINI ¿COMO SE CONTROLAN LOS GASTOS RESERVADOS (SECRETOS)


Escribímos este artículo con motivo de que existe un email que viene circulando en diversas redacciones periodísticas y personalidades políticas sobre un funcionario recientemente depuesto en la DINI, que habría “donado” 100 de sus libros sobre GEOPOLITICA y que luego los cobrara a la dicha entidad, pagándose por ellos S/. 1 200 soles.

De acuerdo a la información referida; al parecer existen en los archivos administrativos de dicha entidad informes legales y administrativos que establecen que un funcionario no puede vender nada a su propia entidad. Razón por la cual se habría decidido efectuar el pago a través de la Partida de “GASTOS RESERVADOS”.

Todos los peruanos sabemos que el gasto de los recursos públicos tienen que ser rendidos escrupulosamente, pues son de todos los peruanos.

Cuando una entidad pública hace uso de ellos, deben tener el sustento documental que respalde el gasto. Ejemplo: Facturas, Recibos de Honorarios, Boletas de Venta, etc.

Ningún gasto que no tenga sustento puede ser admitido como válido en la administración pública. Quien lo admita incurre en responsabilidad funcional grave.

Sin embargo, existe una excepción, que es aceptada por ley debido a la naturaleza del gasto. Es, el denominado GASTO RESERVADO o gasto SECRETO.

La DINI, en razón de las labores secretas que realiza es una de las entidades públicas que está autorizada a efectuarlo.

Claro, tiene explicación, pues –por ejemplo- nadie se imagina que el pago a un “informante” esté respaldado por un comprobante de pago.

Ello no significa que no exista control, pues la ley ha establecido un control singular para ello. Sin embargo, no cabe duda que es un gasto muy difícil de controlar, ya que mensualmente se globaliza todos los gastos del mes y se contabiliza en la ya famosa “PARTIDA ESPECIFICA DE GASTO 73 – REGIMEN DE EJECUCION ESPECIAL”.

Esta partida es muy difícil de fiscalizar, pues nadie, ni la Contraloría ni el Órgano de Control Interno puede ver detalladamente en que se gastó el dinero, sólo le informan –por ejemplo- que el monto “S/. X” fue gastado en el Operativo: “CHAVO y ÑOÑO”; y éstos deben creerlo, siempre y cuando “verifiquen” algún documento que diga el nombre del referido operativo, y punto, gasto aprobado.

Claro, hay que pensar sanamente que todos los operativos “realmente existen” o que el pago a los informantes es tal y no son “informantes fantasmas”. El tema más es de confianza.

Lo que se compra o contrata con esta Partida no se va a encontrar jamás detalladamente en libros contables ni en los archivos administrativos y logísticos, pues esta Partida es “Secreta” y como su rendición es sui generis está lacrada.

Pero, ¿Existe la seguridad que verdaderamente los dineros que salen por esta Partida, son gastados en forma debida?

Dicen que Vladimiro Montesinos llegaba a gastar hasta S/. 12 millones por esta Partida. Claro, el SIN no tenía ORGANO DE CONTROL, pero, ¿Cual es el rol del OCI o la CONTRALORIA en este tema?

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JAIME ESPEJO ARCE